10 cosas navideñas

Si señores, sé que aún es noviembre y que aún no es navidad pero como yo soy recontra rebelde y me zurro en el pensar colectivo, quise escribir sobre 10 cosas navideñas clásicas en la casa Martinez. Ahi van:

1.- Los adornos de navidad: En mi casa, la gente se afana maleado con los adornos y las luces. Poco falta para que mi mamá nos envuelva en luces navideñas y nos cuelgue bombitas en las orejas. No puedo negar que la casa se ve raaaaaaagia después de que gastamos mil cintas adhesivas, 500 barras de silicona y compramos 100 cajas de luces pero después el recibo de luz y las paredes sin pintura nos hacen decir: "A la pr3xima sólo pondremos el árbol y el nacimiento, nada más". Si claro. 

Caso aparte es que por ser la única "joven" de la familia, yo soy la encargada de, escalera en mano, treparme en cuanta ventana encuentre para ponerla navideña. Aqui saben que no me gustan las alturas (si, para mi subirme a una ventana es una altura que puede matarme) y sin embargo me obligan a hacerlo. Papa Noel, no sabes como odio tu rebosante figura.

2.- El recojo del pavo y las canastas navideñas: A mi viejo le caen de 3 a 4 canastas cada año y la que tiene que ir a recogerlas desde hace 2 años casi siempre soy yo. Termino convertida en pulpo con las canastas siempre pidiendo auxilio al señor taxista de turno que me mira con odio porque yo tengo 4 canastas y fácil él no tendrá ninguna. No se enoje señor, esta vez le haré una canastita para usted :D. Otra cosa es el recojo del pavo: aqui también siempre voy yo. Una vez me estafaron y me dieron un pavo de menos kilos de los que correspondía y mi mamá casi me asesina. Pensé hacerle la técnica del Foie Grass al pavo muerto (si no sabes cual es la técnica del Foie Grass, googlea pe, dale uso a tu internet comparito(a)) de lo desesperada que estaba pero no iba a funcionar. Ni cagando. Ese pavo fue discriminado y comimos otro más tacuchi. Al año siguiente me quisieron hacer lo mismo pero puse mi conocida cara de asfdasfasgsfass a la tipa de San Fernando y terminé con hot dogs, chorizos, pates y demás embutidos para suplir el kilaje menor del pobre pavo. Salía triunfante de ese lugar con todo mi cargamento para engordar a mi familia hasta que un chico disfrazado de chanchito me empezó a perseguir al ritmo de la culebritica. Yo, mismo chasqui llevando mi pavo y mis embutidos, empecé a correr despavorida buscando la salida (tengo terror a las personas disfrazadas, ese es tema de otro post) y atrás mío corría también el chanchito diciendome: "Amigaa no corras que te quiero regalar un polo". Este año, yo seré la que persiga al chanchito. #Venganza #HeDicho.

3.- Los villancicos: Broder, los villancicos me hartan. Mi hermana ponía villancicos cuando empezabamos a adornar la casa y cuando la "desadornábamos". Escuchábamos a los Toribianitos con su voz de pito cantando Noche de Paz, la canción del burrito y la canción esa de la sopa que no se la quisieron tomar y que San José, que tenia hambre, se la empujó. Hasta que una navidad, mi hermana sorprendiC a todos: había grabado un CD con canciones navideñas de Luis Miguel y demás artistas que cantaban bacán y por fin descansamos de los Toribianos (lo siento chiquillos pero en mi casa ya no tenían cabida) y para "desadornar" la casa grabó otro CD con villancicos pero cantados por Alvin y Las Ardillas. ÉXITO TOTAL. 

4.- La cena navideña: Mi madre recontra tirana no nos da ni un pan el 24. Nos despertamos tarde, tipo 10, 11 de la mañana, desayunamos más o menos algo potente y de ahí no vemos alimento hasta las 12 de la noche. Mientras arreglamos la mesa o mientras trozamos al pobre pavo, mi papá, mi hermana, mi hermano y yo (en las épocas donde estábamos juntos para Navidad) siempre nos robábamos algo sin que mi mamá nos viera: un poco de panetón, un pancito, un poquito de pavo, una pasa, TODO VALE. Cuando eramos más jóvenes, mi mamá nos mandaba a jatear (para que no nos dé hambre) y nos despertaba a las 11:30 para cenar. Yo siempre me despertaba de mal humor y comía con cara de asfdasfsaasdfg porque interrumpian mi sueño. Ahora nadie duerme (para evitar posibles malas caras en la mesa y posibles miradas de odio de mi mamá) y nos quedamos mirando el pavo en el horno con cara de carnero degollado.

5.- La bendita canción navideña cebollera: Esa que dice que por eso y muchas cosas más, vayas a su casa esta navidad. No me gusta, detesto esa canción porque siempre, siempre se me hace un nudo en la garganta cuando la escucho (si, porque hasta la mas macha de las machas llora). ¿Quien fue el autor de esa letra tan cebollera? ¿Por qué es tan triste? ¿Por qué nos invita a su casa en esta navidad y no nos invita en resto del año?. Esa canción esta prohibida en mi casa los 24. Mi mamá se deprime porque, desde hace unos años atrás, mi familia nunca está junta para navidad. Somos 5 en mi familia pero siempre falta alguien por alguna razón X: en el 2008 yo no estuve y mi vieja lloró, en el 2009 mi hermano no estuvo y mi madre volvió a llorar, en el 2010 mi hermana no estuvo y mi madre lloró porque su nieto no estaba aqui y este año van a faltar mi hermano y hermana, imagino desde ya las lágrimas de mi mamá porque dos de sus retoños no estarán para robar comida y se tendrá que contentar conmigo. Yo que soy recontra entretenida, ya me veo chupando en mi cuarto el ron que hace meses me viene haciendo ojitos  celebrando el nacimiento del niño Jesus (yo celebro por ti Jesusito) y dejando que en el primer piso a mi madre se le pase el llanto y la pena al escuchar la canciones toneras del cd Viejitos pero Calientes (tu también tienes ese CD en tu casa, no te hagas).

6.- El brindis: Cuando pasábamos navidad en la casa de mi abuelo, era clásico que todos, TODOS dijeramos algo por la Navidad. Yo, que siempre le he tenido pánico a hablar en público, me escondía en el baño hasta que escuchaba que mi abuelo decía: "Pueden empezar a comer" y salía triunfante. Me atracaron hasta los 7 años, porque a los 8 ya era obligada por mis tías con su "Desee feliz navidad hijita, no sea chuncha" a decir aunque sea NAVIDAD, sonreir y sentarme. Mi abuelo, asi yo dijera cualquier estupidez, siempre me aplaudía y yo me sentaba a comer con la cara y las orejas rojas del roche. Ahora pienso que él solo hacia eso para que todos nosotros dejaramos de ser tan "chunchos" y sacaramos nuestro Miguel Angel Cornejo interior. Bueno pues, mi vieja se copió y aqui también todos tenemos que decir algo. Las paltas, la cara y orejas rojas ya pasaron en mi caso felizmente y hablo hasta que todos me miran con cara de : "Ya pues Anna, callate que tenemos hambre" :(. Eso si, mi mamá no habla porque se pone a llorar, mi papá no sabe que decir, mi hermano mete floro (y también hace hablar al pavo que casi siempre dice: "Por favor no me coman") y mi hermana siempre dice FELIZ NAVIDAD ¬¬.

7.- Los regalos: Aquí en casa son bien graciosos, dignos partidarios de la navidad y no ponen ni un regalo  debajo del árbol (salvo los regalos que desde hace 4 años aparecen de "Papa Noel" para mi sobrino). Todo bacán porque la Navidad no son solo regalos, es compartir con la familia y blah blah pero... ¿NI UN MISERABLE REGALO PARA MI? ¿LA MAS PEQUEÑA DE LA FAMILIA? ¿EN SERIO? Un calzón al menos pero NADA. Los "grandes" no tenemos derecho a regalo. Pasaste los 6 años, te pelaste. Por eso, este año se me ocurrió una idea para no pasar una navidad sin regalo: Ahora que somos 4 personas las que vivimos en mi casa hemos decidido jugar al "amigo secreto" entre 4 (bien monce nuestro juego pero dejennos). En una semana, ya deben estar pegando su lista de posibles regalos en la refri para ir comprando con tiempo. Si, yo fui la de la idea de la lista porque sino regalarán cosas que no queremos/necesitamos y conociendo a mi mamá, a mi hermana y a mi que no disimulamos nuestras caras de asdfgasdhasfd, nos ahorraremos regalos inutiles y un "gracias" hipócrita (burlas de por medio también, aqui somos bien trolls) y nos quedaremos contentas con el regalo que queremos. Todos ganan.

8.- El momento post-cena navideña: Son las 12, tomamos espumante (porque lo que tomas en navidad NO es champagne... ENTIENDE) y corremos como si estuvieramos en una maratón hacia la mesa. Comemos buenazo, contamos anécdotas viejas, nos reimos y cri cri cri ... toda la gente joven nos miramos las caras con un ¿Ahora que hacemos? dibujados en una nube imaginaria. En mi casa, en donde casi siempre cae uno o varios polizontes sin hogar (mi mamá se toma a pecho el "Ven a mi casa esta navidad") se arma una jarana de padre y señor mío donde toda la gente vieja (o sea mi mamá, mi papá, mis tias, y demas polizontes viejos) tonea hasta las 6 de la mañana me vacilo, hasta las 6 de la mañana me amanezco. Ellos regiazos en su tono y  los jóvenes no tenemos otra alternativa que jatear. Si, yo jateo después de la cena. Que alguien le explique a mi mamá que en Navidad también se puede tonear por favor. POR FAVOR.

9.- La casa post navidad: Todo queda desordenado: platos sucios, copas sin lavar, vasos por toda la sala, muebles sin cojines y un buen etc. La que se levanta temprano al dia siguiente tiene la terrible tarea de limpiar. Antes lo hacía mi hermana, este año creo que la elegida sere yo ¬¬.

10.- El pavo que jamás se acaba: No sé ustedes pero después del 24, en mi casa el 25  comemos lo que quedó del pavo  y así continuamos (por flojera) comiendo pavo y pavo hasta que nos hartamos del pobre. Todo termina cuando mi mamá dice: "Por esto estan todos pavos pues, ya carajo, vamos a comer pollo" :D.

Asi son las navidades aquí, tienen una combinacion de tristeza con alegría que al final termina en resaca y harto pavo x). Ahora diganme ustedes...¿como pasan los previos a la Navidad, la Navidad en si y la post navidad? :D

Porque esta será la canción que bailaré mientras me empujo el ron que me hace ojitos.

PD1: No postee un villancico porque NO ME GUSTAN y aparte porque aún no es Navidad :D
PD2: Ya viene el próximo videopost. Lili está emocionada.